"Las empresas han buscar a los centros de investigación y las universidades para innovar tecnológicamente"
director del Instituo de Ciencias Fotónicas (ICFO)
El doctor Lluís Torner ha tenido un papel fundamental en la creación del ICFO hasta convertirlo en uno de los centros de referencia en todo el mundo. Un esfuerzo premiado por la prestigiosa Sociedad Americana de Óptica este 2011. Doctor en ciencias físicas por la UPC, mantiene el vínculo con la universidad como catedrático, preside la Associació Catalana d'Entitats de Recerca y es miembro del Comité Científico del Centro Internacional para el Debate Científico.
La fotónica es una de las tecnologías transversales —con la biotecnología, la nanotecnología, la nanoelectrónica y los nuevos materiales— que la Unión Europea reconoce como claves para el futuro económico del continente. Son muy pocos los centros de investigación dedicados exclusivamente a este campo, y Cataluña es líder gracias al Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO).
El ICFO abarca diferentes campos de la fotónica, en especial, sus aplicaciones en biología y medicina, nanotecnología, energía, tecnologías de la información, seguridad y sensores. De esta entidad, cabe destacar la apuesta continuada en jóvenes talentos y un activo programa de colaboración empresarial.
El pasado mes de marzo se puso la primera piedra del nuevo edificio que servirá para ampliar las instalaciones que tiene en funcionamiento el ICFO en el Parque Mediterráneo de la Tecnología en Castelldefels (Barcelona) desde 2002.
En pocas palabras. ¿Cómo le gusta definir la actividad que realizan en el ICFO?
Somos una entidad dinámica y flexible, formada por investigadores muy internacionales, que promovemos la investigación de frontera y el desarrollo tecnológico, y que nos gusta trabajar con todas las industrias y hospitales que se pueden beneficiar de nuestros conocimientos. Buscamos la máxima calidad en todo lo que hacemos y somos flexibles en adaptarnos a las necesidades de nuestros colaboradores. Aspiramos a ser un centro de referencia mundial en nuestro ámbito.
La luz es útil para la salud. Por ejemplo, en biofotónica tenemos entendido que trabajan con oncólogos para tratar determinados tipos de cáncer con luz. ¿Es uno de los avances más esperados?
Por un lado, se buscan sistemas de detección de la enfermedad en estadios muy primigenios, ya sea mediante técnicas de imagen o detectores bioquímicos ultrasensibles. Por otra parte, se investigan técnicas fotónicas para nuevas terapias fotodinámicas de destrucción de células cancerosas de manera no invasiva.
Y en neurología y neurociencias —se habló en el segundo encuentro Light for Health organizado por el ICFO con la colaboración de la Fundación Cellex y del Centro Internacional para el Debate Científico en mayo pasado—, ¿qué investigación están haciendo?
Tenemos varios programas. Trabajamos, por ejemplo, en técnicas de nanocirugía láser aplicadas al estudio de la regeneración neuronal y en diferentes técnicas de imagen óptica avanzada. Algunas de estas técnicas aportan imágenes con superresolución, que permiten monitorizar procesos estructurales y bioquímicos en el interior de células individuales in vivo, a escalas espaciales inimaginables hasta ahora. Otras técnicas, permiten obtener información cuantitativa de parámetros como la concentración y el flujo de oxígeno o la actividad neuronal, de manera no invasiva.
Usted es un defensor de la ciencia de frontera. ¿La llevarán a cabo investigadores consolidados o jóvenes (en el ICFO acogen muchos estudiantes de doctorado)?
Promovemos la investigación de frontera como una de las partes esenciales de la receta, para que una sociedad sea innovadora y económicamente sólida y sostenible de manera estable en la época histórica que vivimos. La frontera puede ser de conocimiento, de tecnología, de concepto, de organización, etc. La cosa es que lleve a innovaciones globales. Naturalmente, la receta incluye muchos otros ingredientes. Es como hacer una buena paella: hacen falta media docena de ingredientes para hacerla, empezando por el fuego, el agua y un buen recipiente donde hacer el arroz.
Hay gente que habla de dos tipos de investigación científica: la aplicada a medio plazo y la aplicada a largo plazo (más ambiciosa). ¿Cómo lo ve en el seno de la BioRegión de Cataluña?
Lo que cuenta es que la investigación que se realice sea nueva y que produzca resultados relevantes, ya sea para avanzar el conocimiento de cómo funcionan las cosas o de cómo funcionan las herramientas que tenemos para manipularlas, o para hacer estos utensilios más baratos, más eficientes o más fáciles de usar... La investigación a medio plazo o a corto plazo puede ser, también, extremadamente ambiciosa, sólo hay que mirar los muchos ejemplos de investigación industrial o clínica que se llevan a cabo. En términos de creación de riqueza, el factor clave es que las empresas busquen el apoyo de los centros de investigación y de las universidades en sus procesos de innovación tecnológica. El valor comercial de los resultados de los investigadores más punteros de todo el mundo puede ser grande o pequeño, pero el valor comercial de sus conocimientos y el de sus colaboradores es muy grande. Las empresas tienen que aprovecharlo.
¿El debate científico que promueve el Centro Internacional para el Debate Científico es una de las iniciativas que contribuirán a generar en nuestro país el nuevo modelo económico basado en el conocimiento?
Todo lo que difunda conocimiento, que ponga en contacto a personas con formación y actividades diferentes, todo lo que favorezca la multidisciplinariedad, ayudará a este propósito. Los desafíos a los que se enfrenta la humanidad son complejos y, por otra parte, en la actualidad los avances tecnológicos son muy especializados. La multidisciplinariedad es cada día más importante para encontrar soluciones. Fijémonos en muchos avances en nanomedicina: a menudo son una mezcla de bioquímica, electrónica, fotónica, micromecánica, microfluídica, materiales...
Investigación financiada por entidades privadas, asociaciones público-privadas, mecenazgo social... ¿Cuál debería ser el modelo de financiación para crecer?
Uno de los avances claves de la investigación en Cataluña durante la última década ha sido pasar de un sistema donde era posible tener investigadores individuales de muy alto nivel a un sistema donde es posible tener instituciones enteras de excelencia. La diferencia en términos de competitividad y de capacidad de realización y adaptación, ya sea científica, tecnológica o de transferencia, es muy notable. En este sentido, el modelo adecuado es aquel en el que las instituciones disponen de fondos basales sólidos y estables, a partir de los cuales atraen recursos de convocatorias competitivas, de modo que todo ello les permite hacer alianzas con las industrias para perseguir objetivos comunes. El mecenazgo es importante para proyectos muy especiales. Por ejemplo, en el ICFO hemos tenido la fortuna que la Fundación Cellex Barcelona se fijara en nosotros y nos ayudara en proyectos que sin su apoyo hubieran sido imposibles. Ahora mismo trabajamos juntos en un proyecto llamado NEST (en castellano nido) dirigido a jóvenes talentos, que es extraordinariamente importante.
Se ha escogido el ICFO, a nivel europeo, para ubicar el Nikon Center of Excellence in Storm. Cuéntenos.
Una de las recientes incorporaciones del ICFO, gracias al programa NEST, es la doctora Melike Lakadamyali proveniente de la Universidad de Harvard. El grupo en el cual ella trabajaba en Harvard descubrió una nueva tecnología, llamada Storm, ahora empleada en varios laboratorios de todo el mundo. Se trata de una técnica que permite obtener imágenes de altísima resolución y que entre otras cosas permite llevar a cabo mapas tridimensionales de conexiones neuronales. La multinacional Nikon Instruments comercializa la tecnología, gracias a acuerdos de licencia con Harvard.
La incorporación de la doctora Lakadamyali en el ICFO, además de los laboratorios de superresolución de que disponemos y la reputación que tenemos de colaboración con el sector industrial, han hecho posible que Nikon decidiera establecer una alianza pionera con nosotros, instalando aquí su centro de excelencia en Storm. El centro nos permite disponer de equipamiento Nikon de primer nivel mundial, que está a disposición de toda la comunidad de la BioRegión de Cataluña, y aprovechar conjuntamente el enorme potencial de esta tecnología para resolver problemas biomédicos.