Un nuevo test del sudor desarrollado por Tecil facilita el diagnóstico de la fibrosis quística
Acaba de obtener la certificación CE y se ha presentado en la 34ª Conferencia Internacional de la Sociedad Europea de Fibrosis Quística.
REDACCIÓN
La empresa de tecnologías médicas Tecil ha obtenido la homologación CE de su analizador de cloro en sudor, ISEsweat, para el diagnóstico de fibrosis quística. La innovación que presenta es que "frente a la alta tasa de errores de manipulación del método clásico es capaz de determinar la concentración de cloro en micromuestras de sudor directamente sobre la piel del paciente de forma rápida y segura”, explica su directora general, Rosa Passarell.
El nuevo dispositivo de Tecil se presentó en la 34ª Conferencia Internacional de la Sociedad Europea de Fibrosis Quística (ECFS) celebrada del 8 al 11 de junio en Hamburgo.
La fibrosis quística es un enfermedad hereditaria grave provocada por un defecto en la proteína del gen regulador de la conductancia transmembrana de la fibrosis quística (CFTR). La mutación en el CFTR provoca desajustes en el transporte electrolítico que eleva la concentración de cloro en sudor. El patrón de oro para el diagnóstico de esta enfermedad es la determinación de la concentración de cloro en sudor, método denominado comúnmente test del sudor, diseñado originalmente por Gibson y Cooke en 1959.
Existen otros sistemas que permiten el análisis in situ del sudor del paciente, pero son métodos indirectos que se basan en el análisis de la conductividad mientras que el dispositivo diseñado por Tecil analiza la concentración de cloro. El test de sudor clásico incluye tres fases: la estimulación del sudor mediante iontoforesis, la recolección de sudor y el análisis de la concentración de ión cloruro. El equipo científico de Tecil ha desarrollado un proyecto de I+D hasta obtener un analizador capaz de medir cloro en micromuestras de sudor. El director Técnico de la empresa catalana, Rafael Camero, explica que “el método clásico del test de sudor requiere la recolección de cierta cantidad de sudor para su posterior análisis bioquímico, lo que presenta un alto porcentaje de resultados fallidos por la dificultosa manipulación”. Añade que, "cuando se detecta un posible positivo mediante el cribado neonatal, la rapidez en obtener el diagnostico definitivo disminuye la angustia de los padres y puede aumentar las esperanzas de vida del niño enfermo o mejorar su calidad de vida”.
El nuevo test del sudor puede ser empleado tanto en las unidades clínicas de pediatría, neumología y gastroenterología como en el laboratorio. Ya se ha comenzado a distribuir a usuarios finales en España, como el Servicio de Pediatría del Hospital Virgen de la Luz de Cuenca y el grupo de laboratorios General lab-Labco, y a distribuidores para la cobertura internacional.