"Busca quién pagará tu producto y encontrarás la respuesta"
Javier de Oca
Estudió Administración y Dirección de Empresas en ESADE. Empezó trabajando en marketing y pronto centró su carrera en el desarrollo de negocio internacional. Durante una época se especializó en el mercado de África, donde dirigía las ventas de una multinacional catalana desde Barcelona. En 2016 cofundó IOMED, de la cual es CEO y Business Developer.
IOMED es una empresa barcelonesa dedicada al procesamiento de datos, orientada a la aceleración de determinados procesos de investigación clínica. Su trabajo consiste en aplicar algoritmos para el procesamiento del lenguaje natural de historias clínicas con el objetivo de generar bases de datos intrahospitalarias que estén completamente estructuradas y codificadas. ¿El objetivo? Que los hospitales exploten estos datos en el campo de la investigación clínica. Javier de Oca, cofundador, CEO y Business Developer de IOMED, explica su temprana motivación por emprender y cómo han afrontado las dificultades una vez creada la empresa.
¿Por qué quisiste ser emprendedor?
Yo llevaba dentro la idea de emprender desde que empecé a estudiar. De hecho, en segundo de carrera fundé junto con otros compañeros una asociación de estudiantes orientada a promover que el alumnado tuviese en mente que una buena salida de la carrera universitaria era emprender.
Cuando llevaba unos años trabajando, por idea de mi socio, pensamos que teníamos que encontrar la manera de reemplazar los métodos de tratamiento de datos que existen hoy en día en los hospitales de nuestro entorno cuando se trata de investigación. Por ejemplo, para hacer un estudio, hay médicos introduciendo datos de historia clínica en hojas de Excel. Pensamos que tenía que haber una forma automatizada e informatizada de hacer este trabajo. Así pues, la motivación ya la tenía, pero en ese momento surgió la oportunidad y fuimos desarrollando IOMED hasta donde estamos hoy.
¿Cuál ha sido la decisión estratégica más importante que has tomado hasta ahora?
Probablemente tenga que ver con los múltiples pivotajes que hemos hecho como empresa. Nacimos con una primera idea que buscamos comercializar de varias formas hasta que nos dimos cuenta de que los primeros enfoques no eran del todo los correctos. Esto nos llevó a replantearnos la empresa completamente, a reorientar el foco de nuestro negocio, la necesidad que queríamos cubrir y la manera en que la queríamos cubrir. Pasamos de un enfoque muy teórico a uno más práctico y orientado realmente a la actividad de investigación que tenemos en los hospitales a día de hoy y con un target comercial y un modelo de negocio mucho más claro.
¿Cuál es el mejor consejo que te han dado?
Sinceramente, el mejor consejo que he recibido es “Follow the money”: busca dónde está el pagador para tu producto y encontrarás la respuesta. El sector salud es un sector peculiar, en el que los pagadores no siempre son tan claros y donde el usuario que consume un servicio no tiene por qué ser quien lo está pagando. Es un sector que además atraviesa muchas dificultades económicas. En esta situación complicada, cuando fundas un negocio que tiene que tener sostenibilidad económica y dar beneficios, puedes entrar en apuros como los que nosotros tuvimos previos a la decisión que describía anteriormente. Y justamente fue ese consejo el que nos animó a tomar la decisión.
¿Y ahora qué? ¿Qué hitos te has marcado alcanzar a corto plazo?
A cortísimo plazo tenemos pendiente cerrar una ronda de financiación que esperamos poder anunciar pronto. A medio plazo, usaremos esa ronda de financiación para expandirnos por Europa y llegar a hospitales que hablen otros idiomas. La investigación clínica es una actividad donde generalmente los estudios de relevancia se plantean a escala internacional y no queremos dejar de participar en ellos.